Leiva, la mitad de Pereza, nos presenta su primera aventura en solitario con este nuevo disco bautizado como “Diciembre”.
La primera impresión al escuchar este disco es que el sonido Pereza se encuentra muy presente dentro de él. La banda con la que Leiva ha contado para este álbum es básicamente la misma que en su grupo, añadiendo una sección de vientos y algún que otro miembro más (alrededor de 8 músicos serán los que lo acompañen en su gira), entre los que encontramos a su hermano Juancho, cantante a su vez del grupo Sidecars.
Ello nos lleva a que este disco suene inevitablemente a una especie de continuación del último disco del grupo: “Aviones”.
Siempre he preferido Leiva a Rubén (la otra parte de Pereza), tanto por su voz como por sus composiciones, lo cual hace que me encuentre ante un disco totalmente de mi agrado. Los adelantos del disco con “Nunca nadie” y “Eme” ya nos mostraban qué debíamos esperar a nivel de sonido. Canciones con alma stoniana (los arreglos de guitarra de Leiva son 100% Stones), estructura Tom Petty y estribillos increíblemente pegadizos. Sonidos limpios y arreglos de vientos que dan otro aire a las canciones. Lo mismo de siempre y a la vez nuevo.
El disco se desarrolla entre canciones rápidas de una clara intención rockera (“92”, “Éxtasis”), medios tiempos pegadizos y en ocasiones vacilones (“Todo lo que tú quieras”, “Penaltis”), y baladas de una gran belleza (“Telediario”, “Vis a vis” o “Aunque sea un rato”). En total 13 cortes que dan un sonido claro y compacto al disco, cada uno de ellos con sus diferencias pero que encajan perfectamente unidos.
Por tanto, Leiva ha arriesgado poco con su disco en solitario, pero ciertamente para nada le era necesario y creo que nadie lo esperábamos, simplemente ha creado un disco agradable de escuchar, de un buen nivel compositivo y que lo reafirma en su sonido ya de por sí característico, lo cual no es poco en los tiempos que corren.